Para el doctor Jon Roxarzade, la odontología debe pasar de ser reactiva a ser proactiva y preventiva. “¿Qué tiene que ver mi corazón con mi boca?”, le preguntaban sus pacientes. “Tu boca es la puerta de entrada a tu cuerpo. Es donde todo comienza. Si no te has dado cuenta, están conectados. Tu boca está literalmente a unos centímetros de tu cerebro, de tus ojos y, en el mejor de los casos, a un pie de distancia de tu corazón.Lo que entra por tu boca, pasa al resto de tu cuerpo”, les respondía cuando atendía consult
Roxarzade lo explica con un ejemplo: poner glicerina natural debajo de la lengua de un paciente puede salvarlo durante un paro cardíaco. Dado que la boca está muy vascularizada, los medicamentos administrados por vía oral pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Es algo que el paciente debe tener muy presente. “Algunos vienen y me dicen, “Bueno, estoy tomando todos estos medicamentos, pero no sé para qué son buenos”. Yo necesito saber qué toma para saber qué anestesia le pongo y en qué cantidad. Todo importa”.
Desde hace una década, diferentes investigaciones evidencian el vínculo entre la boca y el resto del cuerpo. Roxarzade lo tenía claro, pero hace años no tenía datos o estudios para demostrarlo. “Cada día aprendemos más”, afirma Roxarzade y asegura que muchas enfermedades graves están relacionadas con una higiene bucal inadecuada. “La misma bacteria que encontramos en la enfermedad de las encías está en la enfermedad cardiovascular o renal”.
Un estudio, publicado en el Journal of Pharmacy and BioAllied Sciences, señaló un vínculo entre la enfermedad periodontal inflamatoria crónica y las condiciones de salud sistémicas, como la enfermedad coronaria. El equipo de investigación se centró en cómo la Proteína C Reactiva (CRP), la cual cuando se asocia con la periodontitis, puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas crónicas.
El doctor Roxarzade explica que bacterias similares pueden desarrollar tanto periodontitis como demencia. “Los mismos biomarcadores de la enfermedad periodontal están en la demencia”. Según un estudio británico, de 2012, los adultos mayores con mala higiene dental tenían un 76 % más de probabilidades de desarrollar demencia. En 2013, un estudio llamó Porphyromonas Gingivalis, a la bacteria que está asociada con la enfermedad de las encías. Esa misma bacteria fue la que encontraron en el cerebro de las personas con demencia.
¿Cómo prevenir enfermedades que entran por la boca?
Le respuesta está en la odontología preventiva y en una mejor educación a los pacientes. Los controles dentales de rutina son el secreto para revelar condiciones de salud incipientes.
Investigadores de un estudio, publicado por la American Heart Association, concluyeron que pacientes que recibieron una higiene bucal adecuada tenían un riesgo 24 % menor de paro cardíaco y de 13 % menor de accidente cerebrovascular, al de pacientes con una higiene bucal deficiente.
Otro estudio mostró que pacientes que no visitan regularmente al médico general, pero sí visitan al dentista, tienen mayor probabilidad de descubrir enfermedades en diferentes fases.
Colombia no es un país extraño para el doctor Neil Parsan, hoy miembro de la junta de la Fundación Panamericana para el Desarrollo (PADF), y quien recientemente se pasó por Bogotá para participar en la reunión anual de la entidad y celebrar los 60 años de su fundación.
Parsan vivió en Colombia durante un tiempo, mientras desarrollaba un proyecto con Colsánitas, y cuenta que conoció Barraquilla, Cali, Bucaramanga, entre otras ciudades colombianas. A partir de esa experiencia y con el conocimiento de los sistemas de salud en América Latina, dice con certeza, que el nuestro es uno de los más eficientes del continente, aunque afirma que, en cuanto a salud, en todos los países es bienvenida una reforma y que los retos que tiene Colombia no son diferentes a los de cualquier país del mundo.
TOPDOCTOR MAGAZINE EN ESPAÑOL aprovechó su visita para conversar con él sobre este y otros temas, porque partiendo de la medicina, este especialista de Trinidad Tobago, se ha desempeñado también en la diplomacia, en el mundo financiero y es un emprendedor de esos a los que nada le queda grande.
La mayor parte de su trabajo se ha enfocado en políticas de salud global. Después de haber sido embajador de su país en Estados Unidos y México, luego representante permanente ante la OEA y de vivir en Canadá, Chile y Colombia, no puede menos que expresarse como un verdadero experto en el tema.
¿Cuál es la especialidad del dr. Parsan?
El doctor Parsan ha centrado sus esfuerzos en un viejo estudio sobre la importancia de resolver las seis enfermedades quirúrgicas más comunes del planeta: cataratas, labio leporino, paladar hendido, embarazo obstruido, fístulas y pies equinovaros en niños.
Entonces, convocó a todo un equipo de embajadores y especialistas para redactar una resolución destinada a la Asamblea Mundial de la Salud en Ginebra, con la intención de que estos males fueran considerados como derechos humanos básicos. “Ningún niño nace con un labio leporino porque quiera nacer con él. Nadie nace con una catarata porque lo haya pedido y si una cirugía básica puede hacer que la vida de alguien sea más cómoda, ¿por qué no podemos ayudar?”, enfatizó el doctor Neil Parsan, en el Club El Nogal de Bogotá, donde ofreció una conferencia sobre salud pública.
De familia india y con su inglés acentuado, este joven científico, diplomático, y ejecutivo, también se mueve como pez en el agua en el mundo de los emprendimientos y la tecnología. Su empresa estrella es una aplicación de telemedicina que bautizó Your 24 seven doc, enfocada en medir las tendencias en salud de los países latinoamericanos.
Your 24 seven doc fue diseñada para el servicio de los pacientes, y no al revés como casi siempre sucede. El punto era crear una aplicación de médicos tipo Uber. Así que a partir de la implementación de una sofisticada tabla de horarios, Your 24 seven doc hoy puede ofrecer servicios médicos las 24 horas del día, los siete días de la semana, a pacientes que lo requieran de manera inmediata, sin necesidad de esperar una cita.
Dice el doctor Parsan, que atienden más de 900 enfermedades diferentes de manera virtual a través de la aplicación, y que pueden documentarlas a través de la tecnología, que arroja datos reveladores sobre la salud de los latinoamericanos, quienes, en términos generales, sufrimos una crisis de enfermedades no transmisibles, como hipertensión, diabetes y obesidad y también enfermedades cardiovasculares ocasionadas por el consumo de tabaco. La alerta en la región tiene que ver con el alcoholismo que, según Parsan, va en aumento. Y en el norte de Bogotá, afirma que hay un gran problema de diabetes. Estos datos, permiten gestionar la prevención y enfocar el trabajo de los especialistas en ellos. Así se salvan vidas humanas.
¿Qué dice Parsan sobre el Covid-19?
La conversación con Parsan llegó al punto inevitable del Covid-19. “El Covid lo cambió todo. Cambió la forma en que trabajamos, en que operamos, la forma en que nos comunicamos. Pero en realidad, cambió la medicina. Cambió a muchos médicos. De hecho, alrededor del 80% de los especialistas en los Estados Unidos no quieren ir a trabajar a un hospital, preferirían ser autónomos, debido a la tensión mental que sufrieron durante la pandemia”.
El doctor Neil Parsan ha llegado a la conclusión de que, si bien superamos la pandemia física, aún no hemos resuelto los problemas emocionales que nos dejó, ni el impacto social y económico que provocó. “Puede que el Covid esté fuera del radar por el momento, pero su huella será perpetua y nos afectará a lo largo de nuestras vidas”, afirmó con certeza, para luego confirmar algo en lo que los especialistas han insistido últimamente: “Debemos prepararnos para otra pandemia”.
Y, ¿estamos preparados para una nueva pandemia?
“Aprendimos algunas buenas lecciones. Los países aprovecharon la oportunidad para reforzar sus sistemas sanitarios, poner en marcha los mecanismos adecuados de seguimiento y vigilancia médica, formar adecuadamente al personal de salud y hacer seguimiento de la higiene básica en las escuelas y otras instituciones. Hace años esto era impensable, incluso era inculto ver a gente caminando con mascarilla, hoy en día es todo lo contrario. Así que realmente se alteró el paisaje de todo lo que vemos. Y creo que si los países no actúan a toda prisa para poner esas lecciones en práctica, y prepararse para otra pandemia, todo esto habría sido en vano”. ¿Todo? “Sí”.
Parsan se despidió de Colombia, pero prometió regresar porque guarda buenos recuerdos de nuestro país. De hecho, confesó que es su preferido en Latinoamérica y nos dejó un consejo saludable: “Tu salud es tu riqueza. Todos los lujos y disfrutes de la vida, pueden reducirse a cero, si no estás saludable”.
El déficit de fármacos no es nuevo en Colombia. El problema se empezó a evidenciar a mediados de 2022 cuando las farmacias se quedaron sin medicamentos, para entregarle a los pacientes de las EPS, que sufren de trastornos mentales, condiciones cardíacas, VIH y diferentes enfermedades comunes y crónicas como epilepsia, diabetes e hipertensión arterial. Esta preocupante situación obligó a algunos usuarios a tener que pagar altos costos por los medicamentos en una farmacia para no poner en riesgo su salud, y lógicamente afectando su bolsillo.
Ese es el caso de César Aguirre, un relacionista público de 56 años que, a pesar de contar con un plan complementario en salud, venía reclamando juiciosamente sus medicamentos en la farmacia asignada para el manejo de una falla renal crónica y una hipertensión arterial, que si no controla debidamente sabe que puede terminar en un problema cardiaco o en un accidente cardiovascular.
Su panorama cambió desde octubre de 2022. “Llegué y la fila era más larga de lo normal, pasaron más de 20 minutos y no se movía. Pedí a la señora que estaba delante de mí que me guardara el puesto mientras iba hasta la puerta principal a preguntar qué pasaba. Caminé no menos de 200 metros, ya se podrá imaginar la fila en medio de una llovizna y un frío tenaz”.
Al llegar a la entrada, Aguirre le preguntó a un guarda que lo único que atinó a decirle era que sólo estaban dejando entrar de a cinco personas. Vio salir a una pareja de adultos mayores renegando porque no les entregaron los medicamentos. Le preguntó al señor qué le sucedía y entre el disgusto y la preocupación le dijo que le habían dicho que no tenían la medicina que necesitaba. Se trataba de un fármaco para su esposa, que tiene una enfermedad crónica del hígado y no puede suspender el tratamiento. Lo que dijo la persona que los atendió en la farmacia era que les tocaba comprar el medicamento en cualquier farmacia comercial. El valor al público oscilaba entre los 250 y 300 mil pesos.
Una crisis nacional
Y así como esta pareja hay miles o quizás millones de colombianos que hoy viven situaciones similares en el país. La escasez de medicamentos es un tema preocupante. César González, gerente de salud de la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (ACEMI), gremio que agrupa las entidades promotoras de salud (EPS), le planteó la situación al actual gobierno desde que empezó el empalme, es decir, a mediados de 2022.
Para ese entonces ya se percibía insuficiencia de algunos medicamentos, por causas asociadas a distintos factores: un desabastecimiento mundial debido a la alta demanda de medicamentos que se empezó a sentir después de la pandemia del Covid-19.
Luego del encierro mucha gente volvió al médico para hacerse sus chequeos normales y eso hizo disminuir los inventarios. También influyó el colapso de la cadena de suministro de materias primas provenientes de Asia y de Ucrania, que por su situación bélica con Rusia tiene paralizada la fabricación y la distribución de medicinas.
En Colombia, un elemento que genera mucha incertidumbre es el futuro de la reforma a la salud propuesta por el gobierno nacional, que aún no había iniciado debates en el Congreso de la República.
Lo que menos se consigue
Actualmente, más de 50 medicamentos, (entre ellos diclofenaco, acetaminofén, amoxicilina y losartán), según el consolidado de Invima con fecha del 28 de febrero, se encuentran desabastecidos o en riesgo de escasez. Muchos se preguntarán, ¿por qué las EPS no tienen medicamentos para dispensar y las farmacias comerciales sí? La respuesta es que son dos canales distintos, con diferente modelo de negocio y de presupuesto.
La solución, dicen algunos actores claves en este tema, es impulsar la producción local para no depender de los productos importados y promover los medicamentos genéricos que tienen un menor costo. A pesar de que para ACEMI la situación ha mostrado algo de alivio durante el primer trimestre del año, “todavía hay mucho por resolver”, Según Castiblanco, “falta más seguimiento y una posición más comprometida de los involucrados en el proceso porque es responsabilidad de todos.
A veces se percibe como una falta de interés de encontrar una salida a esta escasez que, sin duda, es muy grave. En una situación donde está en juego la vida y el bienestar de los más de 34 millones de afiliados. Desafortunadamente no hay un panorama alentador y esto no se va a resolver a corto plazo”.
Mientras tanto, los pacientes crónicos que requieren medicamentos de forma permanente piden soluciones. Con el costo de vida tan alto, muchos no tienen dinero para comprarlos y parar el tratamiento implica poner en riesgo la vida.
Lionel Messi ha sido considerado un verdadero extraterrestre por los fanáticos futboleros, quienes se cuestionan de dónde saca tanta destreza este hombre, que a pesar de sus limitaciones de estatura, logró superar barreras y llegar a ser reconocido como el mejor jugador del mundo.
Vale la pena el recuento histórico de su relación con el balón, que dicho sea de paso, supera los estándares, por lo menos en este planeta: Messi tiene más de 80 títulos homologados en el libro de los Guiness Records. Entre ellos se cuenta la proeza de haber superado los 804 goles, en más de 1020 partidos jugados, lo que lo convierte en el máximo goleador en la historia del fútbol.
Todo esto, a pesar de no ser lo que podría considerarse físicamente un súper hombre. Messi mide 1.69 metros, y aunque es más alto de lo que muchos creen, su sobrenombre, ‘La Pulga’, remite a una deficiencia hormonal que padece de nacimiento, y le fue descubierta cuando jugaba en Newell’s Old Boys de Rosario, Argentina. Tenía cerca de 10 años, medía 1.25 metros, y aunque ya se perfilaba como un grande del fútbol, su baja estatura amenazaba con mandar al traste su prometedora carrera.
Fue el endocrinólogo, Diego Schwarzstein, quien lo recibió en su consultorio cuando los técnicos del equipo resolvieron que el asunto de la estatura de Messi debía tratarse con urgencia. De hecho, los pronósticos lo condenaban a medir 15 centímetros menos, de no haber sido por el tratamiento al que fue sometido durante su adolescencia.
En Argentina, donde el fútbol es una religión y los futbolistas casi dioses, Schwarztein es considerado todo un héroe porque se dice que sin este tratamiento, la historia del mejor jugador del mundo sería diferente. Sin embargo, el endocrinólogo es categórico al afirmar siempre que “la calidad futbolística de Leo es tan grande, que habría sido un crack, incluso midiendo 1,50 metros de estatura”.
Lo cierto es que después de varios análisis, el especialista rosarino, decidió someter al pequeño Messi a terapia de reemplazo de la hormona de crecimiento, un tratamiento costoso, largo y dispendioso, que consistía en inyectar diariamente la versión sintética de la sustancia para suplir su deficiencia en el cuerpo del futuro astro. Leo ha contado varias veces que aprendió a aplicarse él mismo sus dosis. “Era una aguja muy chiquita y le inyectaba la cantidad que tenía que aplicarme. No me dolía”. Era algo que tenía que hacer, y lo hacía con normalidad”, afirmó Messi.
La familia Messi-Cuccittini no era precisamente adinerada, sin embargo la seguridad social que cubría a su padre, en ese entonces trabajador de una siderúrgica, pagó los primeros años del costosísimo tratamiento. Y cuando Messi ya se perfilaba como una estrella, el Barcelona decidió terminar de pagar su tratamiento.
En sus entrevistas, el doctor Schwarztein siempre aclara que la terapia de reemplazo hormonal hizo crecer a Messi porque tenía una deficiencia de esta sustancia en su organismo, pero que no por ello se convirtió en semejante astro. Y cuenta que en ese entonces, cuando el futbolista de nueve años le manifestaba su preocupación por su baja estatura, él lo tranquilizaba diciéndole: “Quédate tranquilo que vas a ser más alto que Maradona. No sé si vas a ser mejor, pero si más alto”.
Schwarztein cumplió: Messi creció hasta superar, por dos centímetros a Maradona, quien medía 1.67 metros; y lo de ‘mejor jugador’ se ha convertido en tema de largas discusiones de apasionados por el fútbol.
El caso es que es importante aclarar que no cualquiera que se someta al tratamiento de reemplazo de la hormona de crecimiento, crece como le sucedió a Messi. “No tenemos la pastillita mágica para crecer”, aclaró el especialista en alguna entrevista en la radio argentina. “De ser así -agregó- sería fácil jugar en la NBA. Nos tomamos la pastilla y llegamos a medir más dos metros para poder jugar básquetbol. Pero esto es imposible”.
La deficiencia de hormona de crecimiento es una condición médica que se diagnostica mediante pruebas específicas y solo quienes la padecen se benefician del tratamiento. En caso contrario, pueden presentarse efectos secundarios graves como diabetes, hipertensión arterial, insuficiencia cardiaca, entre otras complicaciones.
Los especialistas suelen recalcar la importancia del diagnóstico certero, dado que el crecimiento es uno de los temas de salud que más preocupan a los padres. Además, según los estándares latinoamericanos, no todas aquellas personas que midan 1.60 metros de estatura sufren de déficit de la hormona de crecimiento. Para diagnosticar esta enfermedad los endocrinólogos no solo someten a los pacientes a diversas pruebas médicas y evalúan características como edad, peso, estatura. También estudian su entorno familiar, dado que la carga genética juega un papel importantísimo en el crecimiento de los niños.
El caso de Messi fue diferente: ni su padre, ni su madre, ni sus hermanos, se caracterizaron por ser los más bajos del colegio, o del equipo, como le sucedió al pequeño gigante del fútbol, quien además ha tenido que vivir con el sobrenombre de ‘La Pulga’, a pesar de que a estas alturas se aleje mucho del tamaño del diminuto insecto.
Por sus siglas en inglés, a esta deficiencia se le conoce como GHD (Growth Hormone Deficiency) y es un trastorno clínico causado por problemas en la glándula pituitaria, que afecta tanto a niños como a adultos. Hasta hace poco se pensaba que el efecto de esta hormona finalizaba una vez terminado el proceso de crecimiento de una persona, sin embargo a pesar de que su nombre remita al crecimiento longitudinal, también tiene efectos metabólicos en el organismo de los seres humanos. De hecho, de no tratarse su deficiencia, no solo afecta el normal crecimiento de la persona, sino también el desarrollo de su masa muscular y ósea, además de la acumulación de grasa corporal. Sin embargo, la recomendación, como siempre, es que quienes requieran de esta terapia la reciban bajo supervisión médica.
Es cierto que el cuerpo humano produce esta hormona durante toda la vida, pero disminuye gradualmente con la edad. La mayor producción ocurre durante la infancia y la adolescencia, cuando el cuerpo crece y se desarrolla con mayor velocidad, y comienza a disminuir a los 20 años.
Por fortuna para Argentina, y para Leo, el médico Schwarztein descubrió la condición que lo aquejaba. Hoy Messi no sólo es un astro del fútbol, es también la cara de una condición poco común, que debe tenerse en cuenta para que ningún niño que la padezca se quede sin ser diagnosticado y tratado.
¿Quién no ha sentido mariposas en el estómago cuando se enamora? ¿O ha perdido el apetito tras una mala noticia? ¿O se pone de mal humor cuando tiene hambre? Cada día experimentamos como nuestro cerebro y nuestro intestino están conectados y se hablan constantemente.
Los intestinos contienen más de 100 millones de células nerviosas, casi tantas como la médula espinal, razón por la cual los científicos llaman al intestino grueso ‘el segundo cerebro’. De hecho, cuando se trata de comprender el comportamiento y el desarrollo humano, el sistema digestivo desempeña un papel más importante de lo que pensamos.
La microbiota intestinal, formada por billones de seres microscópicos que albergamos en el colon, es capaz de alterar nuestro estado de ánimo y nuestra salud mental. Por eso los médicos tienen cada vez más claro que la función de nuestro sistema digestivo va mucho más allá de procesar la comida que ingerimos.
¿Cómo está conectado el intestino con el cerebro?
Marie François Xavier Bichat, un médico francés del siglo XVIII, descubrió que el tubo digestivo cuenta con su propio sistema nervioso, llamado sistema nervioso entérico (SNE), el cual es independiente del sistema nervioso central, es decir del cerebro. A diferencia de cualquier otro órgano de nuestro cuerpo, nuestro intestino, puede funcionar solo. Alberga cientos de millones de neuronas que le dan autonomía para tomar decisiones y no necesita que el cerebro le diga qué hacer.
Sin embargo, el cerebro influye en el intestino a través del sistema nervioso autónomo (sistema nervioso simpático y sistema nervioso parasimpático), el sistema nervioso entérico (red del tracto digestivo) y las hormonas. El nervio vago es un componente del sistema nervioso parasimpático que conecta el cerebro con el intestino. El 90% de este nervio desempeña la función de enviar señales gastrointestinales hasta el cerebro.
La información del intestino se transmite al cerebro y los desequilibrios que forman ambos órganos pueden provocar cambios psicológicos relacionados con las emociones, los gustos y los impulsos. Los nervios y el estrés causan dolores abdominales, estreñimiento o diarrea y deterioro en la calidad de vida. No sabemos qué se produce primero: el trastorno digestivo o el sicológico, es el mismo dilema del huevo o la gallina, tan común en la ciencia cuando se presentan este tipo de asociaciones.
Casi la mitad de los pacientes con síndrome del intestino irritable (SII) sufren depresión o ansiedad. Las dos enfermedades suelen aparecer juntas, pero se tratan de manera independiente y no como si una fuera el resultado de la otra.
Se ha descubierto también que estos desequilibrios están vinculados al Parkinson, a la demencia, al asma, a las alergias, a la depresión, a los trastornos de ansiedad, al autismo, al alzhéimer y a la esclerosis múltiple.
¿Cómo se comunica el intestino con el cerebro?
El intestino produce alrededor del 95% del suministro de serotonina del cuerpo, un neurotransmisor que juega un papel esencial en el estado de ánimo, la regulación del sueño y el control del apetito. La mala digestión intestinal o los desequilibrios bacterianos, pueden desarrollar depresión y otros trastornos mentales.
Las bacterias intestinales también se comunican con el cerebro al producir metabolitos que influyen en el estado de ánimo y el comportamiento. Por lo tanto, un intestino no saludable afecta el cerebro.
¿Cómo podemos fomentar la salud en el eje intestino-cerebro?
La primera recomendación es una dieta variada que incluya fibra, vitaminas, minerales y probióticos. Los investigadores se centran en suplementos a base de cócteles de bacterias concretas para impactar en la salud mental. Se deben evitar alimentos con alto contenido de azúcar, ingredientes procesados o fermentados, que alteren el delicado equilibrio de las bacterias en el intestino y también, el consumo de alcohol, cafeína y comidas picantes.
También es importante hacer ejercicio con regularidad, pues ayuda a reducir la inflamación en el cuerpo y aumenta la actividad de los neurotransmisores y las hormonas necesarias para una función digestiva adecuada. Debemos bajar el estrés con meditación, relajación, mindfulness o yoga y tratar de dormir bien. Recordemos siempre que lo pasa en nuestro intestino afecta a nuestro cerebro y viceversa.
Durante la última década, se han multiplicado las investigaciones y el interés social sobre la vitamina D, un nutriente que prende las alarmas por su déficit en niños y adultos en el mundo. Algunos estudios muestran que los países con valores bajos de vitamina D tienen mayor tasa de mortalidad por Covid-19. La vitamina D es una barrera contra las enfermedades respiratorias y las infecciones virales. Es un nutriente necesario para la salud, ayuda al cuerpo a absorber y retener el calcio y el fósforo, dos minerales vitales para desarrollar huesos fuertes, tener una buena contracción muscular y disminuir el riesgo de fracturas. Sin vitamina D, los huesos pueden volverse blandos, delgados y frágiles, y causar osteoporosis en adultos y raquitismo en niños. Con esos antecedentes, un baño de sol siempre viene bien. Recordemos que la vitamina D se obtiene en un 90% a través de la exposición solar y, el resto, de alimentos como el pescado graso, salmón, sardinas, hongos, y leche fortificada. Esta vitamina no se encuentra naturalmente en muchos alimentos, por eso los nutricionistas recomiendan apoyarse en suplementos dietéticos que contengan vitamina D2 y D3. Las personas de piel oscura o con altos niveles de melanina suelen tener bajos niveles de vitamina D.
¿Qué hacer si hay déficit?
La vitamina D es vital para el sistema nervioso, óseo e inmunológico. Si tiene deficiencia de está vitamina debe:
Aumentar la exposición al sol.
Comer alimentos ricos en vitamina D.
Tomar un suplemento de vitamina D.
La deficiencia de vitamina D en los niños produce un crecimiento óseo incorrecto, debilidad muscular, dolor óseo o deformidades en las articulaciones. En adultos, los signos son fatiga, dolor de huesos, debilidad muscular, calambres e incluso cambios de humor repentinos. La deficiencia en vitamina D se puede originar por algunas enfermedades como la fibrosis quística, la enfermedad de Crohn, la enfermedad celíaca, la enfermedad renal crónica y la obesidad, porque las células grasas mantienen la vitamina D aislada. Otra causa de su deficiencia puede ser tomar medicamentos como laxantes, esteroides, algunos diuréticos y pastillas para el colesterol y para prevenir convulsiones. Alimentos que contienen vitamina D de forma natural Pescados grasos (como atún, salmón y sardinas).
Trucha arcoíris.
Hígado de res.
Hongos.
Yema de huevo.
Aceite de hígado de bacalao.
Algunos alimentos fortificados con vitamina D
Leche.
Leche de soya, almendras o avena.
Cereales.
Zumo de naranja.
Yogur o productos lácteos
Algunos alimentos fortificados con vitamina D
Leche.
Leche de soya, almendras o avena.
Cereales.
Zumo de naranja.
Yogur o productos lácteos.
¿Se puede consumir demasiada vitamina D?
El exceso de vitamina D provoca hipercalcemia, una sobredosis de calcio en la sangre y
Terremoto en Turquía, violencia en Haití, complicados casos de sarna en refugiados de Cox’s Bar en Bangladesh, un club de madres adolescentes en Zimbabue que alzan su voz con el fin de empoderar su salud sexual, o para no ir tan lejos, Colombia donde los Médicos Sin Fronteras también trabajan sin descanso en poblaciones vulneradas por la violencia, por los desastres naturales, por la pobreza, por la falta de acceso a la salud… Son profesionales, con diferentes especialidades, que a menudo se exponen a situaciones de peligro, como sucesos violentos, o riesgo de contagio de enfermedades letales. Su escenario de trabajo siempre ocupa los titulares de prensa, y donde hay una calamidad, siempre hay un especialista de MSF. TOPDOCTOR MAGAZINE EN ESPAÑOL tuvo la oportunidad de hablar con el director para Latinoamérica de MSF, una organización fundada en Francia en 1970, bajo tres principios humanitarios: imparcialidad, neutralidad e independencia. La organización ha prestado asistencia médica a millones de personas en todo el mundo. Andrés Weisz llevaba una ‘vida normal’, antes de empezar su aventura con Médicos Sin Fronteras. Es economista, trabajaba para Naciones Unidas y había hecho un completo recorrido profesional en empresas multinacionales vinculadas al mundo privado. Pero no era feliz. Un día de enero de 2008, cuando empezaba como administrador en Etiopía, fue enviado a una jornada de vacunación a una zona en medio de la nada africana, llamada Guji. Allá, cuando viajaba en plena noche, en una camioneta de MSF, con dos etíopes y un sierraleonés, entendió que trabajar para una organización así, no es sólo un asunto profesional, es un modo de vida. “Tienes que renunciar al confort”.
Cuenta Weisz que en esta empresa gigante trabajan 63 mil personas de 172 nacionalidades, en 70 países del mundo. Sus recursos provienen de más de siete millones de donantes independientes, no reciben dineros de ningún Estado, de organizaciones religiosas, o políticas, ni de grandes multinacionales. Han estado presentes en algunas de las crisis humanitarias más graves del mundo: la epidemia del VIH en África, la crisis de refugiados en la frontera entre Pakistán y Afganistán, el terremoto de Haití en 2010, sólo por mencionar algunas, y las más recientes, el terremoto de Turquía y Siria, donde centraron su tarea en conseguir refugio a los inmigrantes y brindarles atención médica primaria. En 2022, durante la guerra entre Rusia y Ucrania, MSF puso un tren en Ucrania que atravesaba el país de oriente a occidente para evacuar pacientes, así lograron atender a más de tres mil personas. Trabajar en estos países implica un esfuerzo logístico gigantesco. Tienen tres centros de aprovisionamiento: Bordeaux (Francia), Bruselas (Bélgica) y Ámsterdam (Países Bajos). Desde allí hacen llegar los equipos y medicamentos que necesitan para atender la tragedia. A veces, si las condiciones de la zona no son buenas, les toca improvisar un refugio. Por ejemplo, en Sudán del sur, un país africano muy rural, montaron un hospital inflable para hacer varias cirugías con óptimas condiciones sanitarias. “Hay países donde se llega a acuerdos con los ministerios de salud para operar en hospitales normales. El hecho es poder ayudar”, dice Weisz, con la plena consciencia de que a veces los médicos y los enfermeros trabajan en lugares peligrosos y apartados, en los que se ve la vida con ojos compasivos. MSF en Colombia La MSF tuvo su primera misión en Colombia en 1985, durante la tragedia de Armero por la erupción del volcán Nevado de Ruiz, en el Tolima, que hoy, por su actividad sísmica, de nuevo tiene a la comunidad en alerta. Han pasado 38 años desde la tragedia y la situación de país sigue siendo compleja en muchos aspectos, pobreza, brechas sociales,
conflictos armados y deficiente atención en salud. En este último punto, la zona más afectada es la región del Pacífico, específicamente el Alto Baudó, en Chocó; y el Triángulo de Telembí, en Nariño, hasta donde llega regularmente MSF a prestar una atención médica y humanitaria. Actualmente, para la MSF la problemática más difícil en nuestro país es el paso de los migrantes. Cuenta Weisz que la mayoría son venezolanos, haitianos y personas del medio oriente. “Algunos vuelan a Ecuador, porque no les piden visa, atraviesan Colombia, siguen la ruta de Centroamérica hasta llegar a México y pasan la frontera con los Estados Unidos, una travesía que puede llegar a durar 40 días y solo algunos cumplen su meta de tocar suelo americano”. Las cifras de migrantes son alarmantes. En 2022, 240 mil migrantes cruzaron el Darién, una selva espesa y sin recursos. MSF atendió más de 40 mil consultas médicas y de salud mental, mujeres embarazadas, niños que perdieron a sus padres en la selva, casos de violencia sexual y robos. En su paso por Colombia, Weisz habló de la satisfacción que siente al aportar un grano de arena para que nuestro país tenga una mejor atención en salud en regiones apartadas y poder darle una luz de esperanza a los desplazados por la violencia. Colombia, dice, siempre estará en el corazón de MSF. Destacado MSF es una organización multidisciplinaria en la que trabajan 63 mil personas de 172 nacionalidades, en 70 países. Pie de foto 1: El Geo Barents es el barco que utiliza MSF para rescatar migrantes que salen de Libia. Pie de foto 2: El quirófano, que instalan en una carpa inflable, es la opción cuando las condiciones de la zona no permiten algo mejor. Cortesía MSF. Pie de foto 3: Andrés Weisz, director de Médicos Sin Fronteras para Latinoamérica. TDMEE
Pie de foto 4: En este tren, que adecuaron como clínica, atendieron más de tres mil personas heridas en la guerra de Rusia y Ucrania. Cortesía MSF Pie de foto 5: equipos médicos de MSF afrontan situaciones que no cualquier profesional de la salud vive, pero ellos lo asumen como una forma de vida.
Niebla cerebral posterior al Covid: lo que sabemos hasta ahora y estrategias para ayudar a disolver la nube.
El síntoma más común es el deterioro de alguna de las funciones mentales que hace difícil pensar con claridad, de ahí el término "niebla". Las personas tienen dificultades para encontrar la palabra correcta, recordar nombres, concentrarse o realizar múltiples tareas. La niebla cerebral ralentizar al cerebro en la codificación de información, lo que dificulta el aprendizaje, afecta la toma de decisiones y crea fatiga mental.
El síntoma más grave de la niebla cerebral por COVID-19, afecta a adultos de mediana edad y se denomina síndrome disejecutivo. Las redes cerebrales, frontopariental y frontoestriatal, responsables de las funciones motoras conductuales y mentales, se afectan y hacen que el cerebro tenga una capacidad reducida para funcionar.
Los investigadores de un estudio, publicado en JAMA Network Open a finales de 2001, evaluaron a 740 pacientes de una edad promedio de 49 años, que tuvieron COVID-19, en Nueva York, y encontraron que tenían el síndrome disejecutivo, incluso meses después de recuperarse de la infección por COVID-19. Estos pacientes no tenían antecedentes de demencia ni problemas mentales anteriores al COVID.
Causas de la niebla cerebral
La niebla mental no es solo un fenómeno psicológico, sino un proceso biológico que puede afectar a cualquier persona infectada con COVID-19, sin limitarse a quienes llegaron a la UCI o estuvieron conectados a un ventilador. Su causa es difícil de determinar. Algunos factores comunes son:
Oxigenación cerebral deficiente causada por lesión cerebral, daño pulmonar multiorgánico o uso de ventilador.
Inflamación de las cubiertas del cerebro (encefalitis viral) o de los vasos sanguíneos (lesión microvascular).
Tormenta de citocinas, lo que conduce a una respuesta autoinmune post infecciosa.
La neuropatía autonómica y de fibras pequeñas, de mecanismos virales complejos, podría provocar mareos y aturdimiento.
Estos factores afectan el tejido circundante del cerebro o la. cantidad de oxígeno que recibe, lo que deteriora la función. cerebral y crea la confusión mental asociada con COVID-19.. Un estudio del líquido cefalorraquídeo en pacientes post-. COVID-19, no hospitalizados ni con afecciones graves,. mostró inflamación cerebral. Los sistemas inflamatorios, que. se activan durante la infección, seguían activos incluso. después del virus. Los investigadores vieron que los. pacientes con niebla mental también podían sufrir de. hipertensión, diabetes, apnea del sueño, depresión, ansiedad. y problemas de aprendizaje.
Hay innumerables situaciones que podrían causar o potenciar. los síntomas de niebla mental: la dieta poco saludable, la. mala calidad del sueño, el estrés crónico, los cambios. hormonales, el uso de ciertos medicamentos y afecciones. médicas como anemia, quimioterapia y depresión.
Manejo de la niebla cerebral post-COVID-19
En este caso, los médicos recomiendan anotar los síntomas y. hacerse exámenes médicos, exámenes de laboratorio,. imágenes y estudios neuropsicológicos. Una vez el médico. esté seguro de que las dificultades cognitivas son por el. COVID, hay estrategias de estilo de vida para ayudar a. controlar la niebla mental:
Planificación.
Planifica, prioriza y marcar un horario con tiempos para. descansar, rotando entre tareas mentales y físicas. Escribe lo. que necesitas reforzar en tu memoria. Lleva un diario de. síntomas para encontrar factores desencadenantes y. estrategias útiles para el tratamiento; y pide ayuda cuando te. sientas abrumado. La terapia cognitiva profesional es muy útil. en el proceso de recuperación.
Sueño consciente.
Según The Sleep Foundation, los adultos, de 18 a 64 años,. necesitan un promedio de 7-9 horas de sueño. El descanso. es la recarga del cerebro y del cuerpo. Dormir bien es. importante cuando se lucha con la niebla mental, y para. lograrlo debes evitar el café después de las dos de la tarde,. crear un ritual relajante antes de dormir, tomar una ducha. caliente y evitar la luz azul de los dispositivos electrónicos por. lo menos una hora antes de acostarte.
Dieta.
La dieta mediterránea es saludable para el cerebro. Esta. incluye vegetales, granos integrales, frijoles, aceite de oliva,. frutas, nueces y pescado, que tienen grandes propiedades. antiinflamatorias. Evita los alimentos procesados. Recuerda. beber agua durante el día y evita el consumo de tabaco,. alcohol y drogas.
Ejercicio.
El ejercicio es beneficioso en la lucha contra la niebla. mental. Sin embargo, comienza despacio, con movimientos. suaves y estiramientos cortos. Lo recomendable es hacer 30. minutos diarios, cinco días a la semana. Recuerda calentar y. estirar, entre 5 y 15, minutos antes y después de la sesión de. ejercicio.. Socialización. Sé intencional al socializar. Rodéate de personas y. actividades que mejoren tu estado de ánimo. Dedícale. tiempo a la lectura, a escuchar música, a mejorar tu. respiración, a practicar mindfulness, a meditar y mantener. una actitud agradecida y positiva ante la vida.
Sé consciente de otras condiciones. Busca ayuda médica si sientes dolor de cabeza refractario,. entumecimiento, hipertensión, diabetes, depresión,. compromisos del hígado, riñón, corazón, pulmón u otros. órganos.. Es poco probable que la niebla mental sea una condición. permanente. Una reciente investigación, publicada en Brain. Communications, mostró que los sobrevivientes de COVID-19. tenían déficit de atención hasta nueve meses después del. COVID-19 y mala memoria hasta seis meses después. Luego. de ese tiempo recuperaban sus funciones cerebrales normales. La mejor manera de superar la niebla cerebral es. darle descanso a tu cerebro.